El aficionado Celtic puede estar bien contento tras el último partido disputado de las Finales, porque Boston ha dejado claro que los viejos rockeros nunca mueren.
Los Celtics han mandado a los Lakers un golpe muy duro, difícil de esquivar y que suele descolocar mandíbulas, liderados por un vendaval ofensivo de Paul Pierce, el cual señaló tras el segundo partido en California que "No volverían a L.A.", desgraciadamente para Paul y sus vaticinios, los Lakers han rascado un partido en el TD Garden.
Pero esta noche nada, ni Pau, ni Bynum (con la rodilla hecha un auténtico globo, no se como puede mantenerse en pie), ni Odom, ni Artest. Solo un tío con el número 24 a las espaldas, que es capaz de meter 17 puntos sin fallo al iniciarse el tercer cuarto. Kobe Bryant se llama.
Pero no bastó, la heróica de Kobe para frenar a un inspirado "The Truth", que volvió locos a los defensores de Lakers a lo largo de todo el partido, seguido por un gran Rajon Rondo, que, como ya es habitual en cada partido, descoloca la defensa entrando con una facilidad pasmosa para o bien clavarla, o bien doblar un pase que significa en el 80% de los casos, triple de Boston.
Los 38 puntos de Kobe no sirvieron para derrotar a los Celticss
Creo que se puede dejar cerrado el capítulo de "The Big Three" para abrir uno nuevo, "The Big Four". Rondo llegó a los Celtics para completar plantilla, y se ha convertido en uno de los mejores bases de toda la liga, su capacidad de rebote le ha aupado hasta esta posición.
¿El resultado final? 92-86. Pero creo que más que con el dato os deberíais quedar con la actuación (en grupo) de los verdes, que hoy si, son "Los Orgullosos Verdes". Retiro lo dicho anteriormente sobre Paul Pierce, el partido de hoy compensa toda la serie, y lo que de ella queda.
Al final del encuentro, cuando aún los Lakers tenían alguna opción, cabe destacar que Phil Jackson no supo manejar el banquillo. Seamos objetivos, no hay color entre ambos banquillos, y el de los Celtics se estaba comiendo a los californianos, mientras Phil se mantenía impasible en su banquillo, ya veremos como se desarrollan los fichajes este verano, porque L.A. necesita carne fresca.
Por otra parte, cabe destacar el buen juego interior verde (Perkins, Davis...) que hoy hicieron pequeño a las "torres angelinas" Pau y Bynum, un Bynum que debe plantearse seriamente seguir actuando en las Finales, puesto que la lesión puede agravarse.
Lo que ocurrirá en los partidos siguientes es difícil de determinar, Pau asegura que se levantarán en Los Angeles, pero no es lo mismo decir que hacer, los Celtics lo tienen a tiro, los Lakers deberán remar contra la corriente.
Dejo para finalizar esta crónica una frase del gran Larry Bird "En unas Finales se diferencian los hombres, de los niños". ¿Quién fue quién hoy?
A la espera del 6º partido.
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